Con pocas letras, el más poderoso mensaje de esta carta. Aparece en un momento importante donde la quietud abunda y los obstáculos aparecen en los supuestos. Desafiarse y confiar que tu fortaleza es más que tu tormento, y que tu talento y tu virtud más que la crítica o las señales adversas.
Desafíate, desde tu mente que tiene un sueño hacia tu corazón que tiene un plan. Y tu caballo, que representa tu bestia que se anima en tu andar, cabalga hacia el gran destino que tu espada desafía. Viajas para volver y traes noticias de lejos. Viajas para llevar tu enseñanza y sembrar nuevos bosques que darán los frutos de lo nuevo. Te aventuras en lo propio que te aleja de los deseos de otros, que sólo hacen feliz a los demás haciéndote creer que al parecerte a ellos haces lo correcto.
Atrévete a desafiarte. Atrévete a lo tuyo, porque los cobardes no deciden para ti. Tendrás que decidir. Tu avanzar los pone en el rincón de la derrota, y tu paso firme, tu templanza, tu mirada certera hará el resto que falta. Porque nada es imposible y las fronteras son para cruzarlas, vuelves con premios que no esperabas, con sentimientos que no habías disfrutado, con orgullos divinos que te dan el entender que el paraíso no es de los redimidos y temerosos de claustro y letanías, sino de valientes que se desafían a sí mismos para demostrarse una nueva verdad que redibuja los mapas de lo verdadero.
(Arcano Caballero de Espadas, de mi colección privada de Tarot Medieval de Guido Zibordi Marchesi y del dibujante Pietro Alligo. Año 2007, Torino, Italia)