Una sensación de celos, rabia y frustración sin fundamentos, nos invade estos días, porque sentimos que perdemos algo. A su vez, la poca tolerancia nos lleva a días donde explotamos con rabia y cólera por cualquier detalle. Sólo muestra nuestra insatisfacción de intentar sostener algo que no toleramos. Encontramos los espacios para vaciar de mala manera. Podemos perder amistades y alianzas valiosas sólo por el capricho de sospechar o de no tolerar el brillo ajeno. Por otro lado, es un tiempo para encontrarnos con el dinero, los afectos y la vida serena, sólo si nos dejamos llevar por nuestra voz del corazón. El leve capricho de vivir como queremos, ensimismados, sólo demuestra que hemos encontrado una forma de tener calma y bienestar. Los celos y las envidias a nuestro alrededor, otra vez nos enseñan que mostramos demasiado, creando justamente el efecto contrario. Son días de más cautela y privacidad con lo que tienes y da valor.

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